El ave más pesada del mundo

Los seres humanos estamos acostumbrados a ver a las aves de una manera idealizada, admirando sus habilidades para volar a través de los cielos sin apenas esfuerzo, con una elegancia que tan solo este tipo de animales es capaz de demostrar.

Sin embargo, ¿habías pensado alguna vez que no todas las aves son gráciles, desenvueltas y habilidosas para volar a través de la inmensidad del cielo?, y es que tan solo tenemos que hacer referencia a especies tan curiosas como los kiwis, un peculiar pájaro con afilado pico que no es capaz de volar.

Hoy os queremos hablar acerca de otro tipo muy curioso de aves, las cuales tampoco pueden volar ya que han desarrollado un imponente volumen y peso corporal que se lo impide.

La avestruz, el ave más pesada del reino animal

El avestruz (Struthio camelus) es una especie de ave que es conocida por ser la de mayor tamaño existente, así como la única que posee dos dedos en cada uno de sus grandes pies.

En el momento de su nacimiento, las avestruces tienen una medida aproximada de entre 25 y 30 centímetros de altura, con un peso de alrededor de 900 gramos. Datos que contrastan claramente cuando los comparamos con sus características como adultas, momento en el que las avestruces son capaces de llegar a alcanzar los tres metros de altura, así como pesos de más de 150 kilogramos.

Con una cabeza muy pequeña en comparación con el resto de su cuerpo, la avestruz posee un par de ojos grandes y atentos que tienen cinco centímetros de diámetro, con los que ha sido capaz de desarrollar un sentido de la vista excelente, con una gran profundidad de campo.

Otra de sus grandes características es su cuello, el cual está completamente desprovisto de plumas, al igual que sus grandes patas, las cuales son todo un ejemplo de potencia y musculatura perfectamente adaptadas para correr a través de la superficie de la tierra, llegando a alcanzar velocidades de vértigo si se ven acorraladas o amenazadas, con máximos de hasta 74 kilómetros por hora.