Un vertido de gasoil contamina el Río Amarillo
Acaba de producirse un desastre ecológico en China al confirmarse un vertido de gasoil de proporciones considerables en el Río Amarillo, el segundo cauce más caudaloso del gigante asiático después del Yangtsé. El RíoAmarillo, así llamado por el color de sus aguas llenas de sedimentos, abastece de agua potable a millones de personas a todo lo largo del país. La contaminación se ha localizado en dos afluentes de esta arteria fluvial, concretamente los ríos Wei y Chishui, como consecuencia de una rotura en uno de los oleoductos de China National Petroleum Corporation (CNPC), la petrolera más importante de toda China.
Como de costumbre, las autoridades comunistas han hecho pública la noticia con casi una semana de retraso. Al secretismo de Estado se añaden las mentiras de CNPC, que el domingo había asegurado tener la situación controlada. Nada más lejos de la realidad. En el informe se lee que el peor parado de los dos afluentes ha sido el río Wei, que se ha contaminado casi por completo llegando a verter gasoil en el embalse de agua potable de Sanmenxia.
Ahora se trata de evitar que la mancha desemboque en la presa de Xiaolangdi, que embalsa el suministro de grandes urbes como Kaifeng y Zhengzhou, de 5 y 7 millones de residentes respectivamente. Visto el ordenamiento jurídico existente en China, mucho nos tenemos que no van a producirse las depuraciones de responsabilidad necesarias, por lo que ninguna autoridad estatal pagará por su culpa en el desastre.
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