La foca monje del Mediterráneo

Volvemos de nuevo a la zona del Mediterráneo para hablar de otro animal que se encuentra en peligro crítico atendiendo a la categoría CR de la lista de animales en peligro de extinción según la UICN. Se trata de la foca monje del Mediterráneo, una especie que ha visto mermado su territorio y de la que vamos a conocer algunos rasgos fundamentales interesantes.

Características generales de la foca monje del Mediterráneo

Una de las características que llaman mucho la atención en relación con la foca monje del Mediterráneo es que se trata de una especie animal que lleva en la tierra miles de años, encontrando restos incluso en cuevas de Málaga con hasta 14.000 años de antigüedad.

Gracias a estos ejemplares hallados y al estado de sus huesos se da a conocer que por aquel entonces se utilizaban para aprovechar la piel y la grasa a la vez que también su carne.

Uno de estos ejemplares puede oscilar con una longitud que parte desde algo menos de 1 m hasta aproximadamente unos 2,40 m. En cuanto a su peso, generalmente rondan hasta un máximo de 320 kg.

Al igual que ocurre en la mayor parte de las especies animales, las hembras son un poco más pequeñas que los machos.

Su estimación de vida es de 20 años, y en cuanto a su alimentación podemos destacar que se alimenta fundamentalmente de moluscos y peces, necesitando ingerir aproximadamente unos 3 kg de comida diaria.

El hábitat de la foca monje del Mediterráneo

En la antigüedad, la foca monje del Mediterráneo ocupaba toda la zona que cubre tanto el Mediterráneo como el Atlántico por la parte norte de África, una extensión sorprendente que además llegaba incluso a alcanzar las islas Canarias y apenas existía fragmentación alguna.

Sin embargo, actualmente se ha visto reducida a ocho núcleos destacados de los cuales cinco son bastante pequeños y dos apenas cuentan con ejemplares.

Tan sólo encontramos una colonia de considerables dimensiones, la última en todo el planeta y que se encuentra situada en Cabo Blanco. En este lugar se calcula puede haber aproximadamente unos 200 ejemplares, lo cual supone prácticamente la mitad de todos los que por el momento habitan en la Tierra, ascendiendo dicha suma a algo menos de 500 ejemplares.

Los peligros que amenazan a la foca monje del Mediterráneo

Una de las principales razones por las que en muy poco tiempo la foca monje del Mediterráneo se ha visto en este considerable riesgo de desaparecer como especie animal del planeta fue debido a una toxina paralizante que se segregaba a partir de un alga, la cual en la época de los 90 dio lugar a una mortalidad masiva verdaderamente sorprendente responsable principal de la situación actual.

Hay lugares como España donde ya resulta prácticamente imposible poder avistar ninguno de estos ejemplares, una situación pendiente de solucionar a través de diversos proyectos de recuperación que en la actualidad se encuentran en marcha fundamentalmente en España.